Los amantes de emociones intensas y escondidas ya tenéis plan para este fin de semana. La compañía canadiense de Dave St-Pierre (niño prodigio de la danza contemporánea y coreógrafo radical) actúa los días 22, 23, 24, 25 y 26 de Junio en las naves del Español en Matadero. Presenta la segunda parte de su trilogía Sociología y otras utopías contemporáneas.
Danza-teatro contemporáneo, performance adulta y poesía visual; arte escandaloso, fronterizo e íntimo, desprejuiciado. Una catarsis de discapacitados emocionales y náufragos de libertad (todos lo somos en mayor o menor medida). El deseo y la carencia, dos gestos desoladores y toneladas de humor, ironía y provocación.
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El llanto ampliado de un corazón que se fortalece en cada sollozo. La historia no registrada de hombres y mujeres que se buscan y a veces se encuentran.
Una vez que pagas el precio del prejuicio encuentras una obra de arte en estado puro que conmociona más allá de las formas. No dejes que los cuerpos desnudos y las pelucas rubias desvíen tu atención. Ten paciencia, respira, confía. Al final la redención, la inocencia, la ternura, el valor, el juego, la verdad, el llanto, la belleza nos redime de la locura.
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Esta obra me ha hecho recordar una de mis películas preferidas, Short Bus de John Cameron Mitchell, un valiente manifiesto de libertad donde los cuerpos desvelan la fragilidad de los seres humanos y la capacidad curativa de las emociones y el instinto. El propio cuerpo y sus apetencias forman parte de la dinámica saludable de estar vivo.
La visión tántrica nace en el seno del hinduismo como una necesidad de ir más allá de los valores convencionales de la ortodoxia brahamánica. Llega donde no alcanzan los valores de las convenciones sociales. Más allá de las normas esperan ocultas y protegidas las potentes herramientas iniciáticas y transformadoras del sexo y los instintos.
Las deidades femeninas que guían al adepto son terribles e iracundas, sostienen la cabeza cortada de sus amantes y exhiben un collar con la cabeza reducida de aquellos que osaron entrar en su reino con intenciones equivocadas. Las herramientas tántricas no son un instrumento al servicio del placer personal. Son técnicas de desbloqueo emocional y ampliación de consciencia muy poderosas.